Embarazo de alto riesgo
Se trata de un embarazo que pone en riesgo la salud y vida de la madre o del feto. En algunas ocasiones se vuelven de alto riesgo a medida que progresan, mientras que algunas mujeres tienen mayor riesgo de tener complicaciones incluso antes de quedar embarazadas, por diversas razones.
Causas
Edad: Adolescentes y mujeres mayores de 35 años.
Estilo de vida: Actividades como fumar, beber alcohol o usar drogas, ya que el bebé también puede mostrar sus efectos después del nacimiento.
Problemas de salud existentes: Incluyen hipertensión, obesidad, diabetes y síndrome del ovario poliquístico. Las enfermedades autoinmunes, de los riñones y de la tiroides también pueden provocar problemas durante el embarazo. El VIH y el sida y la infección por Zika.
Ciertos factores específicos pueden hacer que sea de alto riesgo, por ejemplo:
Diabetes gestacional: Ocurre cuando una mujer que no tenía diabetes antes, desarrolla diabetes durante el embarazo.
Preeclampsia y eclampsia: Cuando se tiene presión arterial alta después de la semana 20 del embarazo
Gestación múltiple: La presencia de más de un feto.
Parto prematuro anterior: Si se da a luz antes de la semana 37 del embarazo.
Prevención
Asistir a los controles prenatales: Si una madre ha tenido partos prematuros antes, entonces su riesgo de sufrir nuevamente un embarazo prematuro se incrementa si el cuello uterino mide menos de 25 mms a las 22 semanas.
Escuchar al cuerpo: Si algo no anda bien y es fuera de lo común para su embarazo, la mujer tiene que acudir a consulta.
Cambiar los hábitos y tener un estilo de vida saludable: Es importante dejar de consumir alcohol, tabaco y drogas. Empezar a alimentarse de la mejor manera.
Empezar o seguir con una rutina de ejercicio.